El flujo digital
La respuesta es rotunda, y es un sí.
Cuando hablamos de tecnología aplicada en procedimientos dentales, hablamos un método de trabajo en el que se utilizan medios digitales, llamado flujo digital.
Todo este flujo digital es un apoyo para que los tratamientos puedan ser aplicados sin dolor, disminuyendo en gran medida los tiempos y con una precisión mucho mayor. Hace más efectivo el diagnóstico, planificación y tratamiento de los pacientes.
El flujo digital consta de 4 fases: digitalización, diseño, seguimiento y fabricación.
Digitalización
Dentro de este punto nos encontraríamos con 2 técnicas digitales utilizadas para obtener imágenes de la boca de los pacientes: los escáneres intraorales y los CBCT.
- Un escáner intraoral nos permite obtener una fotografía tridimensional de la boca del paciente sin ningún tipo de radiación. Gracias a los escáneres intraorales, los avances respecto a los moldes tradicionales son muy significativos. Con esta tecnología, las dentaduras pueden reproducirse con mucha mayor precisión ayudando en la planificación y en los tratamientos.
- El CBCT (Cone Beam Computed Tomography) es un tipo especial de escáner que emite imágenes en 3D de dientes, tejidos blandos, huesos y nervios. Este tipo de escáner permite obtener proyecciones anatómicas en todos los ángulos de la boca del paciente.
Estas 2 tecnologías nos permiten que la toma de registros de la boca del paciente sea mucho menos molesta para él, aportando la mayor cantidad de datos al respecto y evitando errores también en la fabricación de aparatos.
Diseño o fase CAD
El escáner y CBCT, si es necesario, se integra en un un software que permite predecir los resultados finales de un tratamiento, y también el diseño y creación de cualquier aparato o alineadores que serán utilizados en tratamientos de ortodoncia.
Por esta razón, estos 2 tipos de tecnologías son utilizados principalmente en tratamientos de estética dental (prediciendo los resultados finales y simulando la sonrisa final del paciente), ortodoncia (en el diseño y creación de aparatos a medida o alineadores) e implantología (planificación, guías de transferencia y colocación de implantes).
Seguimiento
El seguimiento en el proceso de Flujo Digital es fundamental para ir adaptando el tratamiento y para que se mantenga siempre actualizado. Gracias al escáner intraoral se pueden seguir haciendo nuevas exploraciones para garantizar que el proceso se siga de la forma correcta y que se cumpla la planificación que se establece al inicio del tratamiento. El paciente podrá demás ver los cambios en el tiempo en forma de superposiciones en 3D.
Fabricación o fase CAM
Una vez el aparato es diseñado en el ordenador trabajando sobre la copia virtual del paciente se procede a la impresión de las estructuras metálicas con tecnología CAM.
Si se trata de fabricación de alineadores los modelos serán impresos con impresoras digitales en alta definición, sin los arrastres o defectos que hasta el momento daban los modelos de escayola, y sobre ellos se fabricarán los alineadores y se recortarán por laser en el caso de sistemas como InvisalignÒ sistema con el que trabajamos en nuestra clínica.
Para la producción de buenos aparatos hechos a medida lo más habitual es recurrir a grandes casas especializadas en la producción de aparatos y buenos laboratorios digitales ya que garantizan que el resultado final sea óptimo debido a su alta capacidad tecnológica y dilatada experiencia. Por tanto en nuestra clínica se realiza el escaneo que luego es enviado a las grandes y reconocidas empresas productoras.
Ventajas
El flujo digital sin duda es un método de trabajo súper innovador que toda clínica dental que quiera estar a la vanguardia en relación a la tecnología debería utilizar.
En cuanto a las ventajas más importantes destacamos:
- Exactitud: Todo el tratamiento se realiza en 3D de forma digital. Esto supone para el dentista un procedimiento predecible basado en un diagnóstico preciso.
- Precisión: La precisión que ofrecen estos medios digitales respecto a las técnicas utilizadas tradicionalmente. Estas técnicas tradicionales realizadas de manera manual son mucho más difíciles de realizar y arrastran más errores en las transferencias de datos que no tienen las técnicas digitales.
- Tiempo: Cómo te decíamos al principio del artículo, este flujo digital es sin duda un método de trabajo. Toda la tecnología utilizada ahorra tiempos en la gestión del proceso y planificación de los tratamientos. Y tiempos en la clínica a la hora de reproducir copias de sus dientes.
- Fiabilidad: El flujo de trabajo digital ofrece a los profesionales una forma segura de satisfacer las necesidades de los pacientes. La planificación permite ver con claridad el proceso y lo que es más importante cuál será el resultado final del tratamiento.
Por suerte, en nuestras clínicas contamos con una experta en este método de trabajo de vanguardia, la doctora María Isabel Vázquez Palacios. María Isabel es ortodoncista y propietaria de la clínica de Hoyo de Manzanares.
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