Las llagas bucales son un problema común que afecta a muchas personas en algún momento de sus vidas. Estas pequeñas úlceras pueden causar molestias al comer, beber y hablar. Por ello, en este artículo te explicamos sus causas, qué tratamientos son los más efectivos y cómo prevenir su aparición.
¡Toma nota!
¿Por qué se producen las llagas bucales?
Las llagas bucales, también conocidas como aftas o úlceras bucales, pueden aparecer por diversas razones.
- Estrés y ansiedad. El estrés emocional puede debilitar el sistema inmunológico, facilitando la aparición de llagas.
- Lesiones en la boca. Morderse accidentalmente la lengua o la mejilla, o el uso de prótesis dentales mal ajustadas, pueden desencadenar llagas.
- Deficiencias nutricionales. La falta de vitaminas, especialmente B12, zinc y hierro, puede contribuir a la formación de llagas.
- Cambios hormonales. En algunas personas, los cambios hormonales, como los que ocurren durante el ciclo menstrual, pueden provocar llagas.
- Alergias alimentarias. Algunos alimentos ácidos o picantes pueden irritar la mucosa oral y causar estas úlceras.
- Condiciones médicas. Enfermedades como la enfermedad celíaca, la enfermedad de Crohn y las infecciones virales pueden aumentar el riesgo de llagas.
Tratamiento para las llagas bucales
Aunque las llagas bucales suelen desaparecer por sí solas en una o dos semanas, existen tratamientos que pueden ayudar a aliviar el dolor y acelerar la curación:
- Enjuagues bucales. Un enjuague con agua salada o productos específicos recomendados por el dentista puede reducir la inflamación y el dolor.
- Pomadas tópicas. Existen cremas y geles de venta libre que contienen ingredientes anestésicos o antiinflamatorios que pueden aplicarse directamente sobre la llaga.
- Buena higiene bucal. Mantener una boca limpia es crucial para prevenir infecciones secundarias y ayudar a la curación.
- Evitar alimentos irritantes. Mientras las llagas estén presentes, es recomendable evitar alimentos ácidos, picantes o duros que puedan irritar aún más la zona afectada.
Prevención de las llagas bucales
- Llevar una dieta equilibrada. Asegúrate de consumir suficientes vitaminas y minerales, especialmente aquellas que apoyan la salud oral.
- Reducir el estrés. Practicar técnicas de relajación, como la meditación o el yoga, puede ayudar a disminuir el estrés y, por ende, las llagas.
- Evitar alimentos irritantes. Si eres propenso a las llagas, trata de evitar alimentos que puedan desencadenarlas.
- Mantener una buena higiene oral. Cepíllate los dientes y usa hilo dental regularmente para evitar infecciones que puedan agravar las llagas.
Las llagas bucales son molestas, pero con la información correcta sobre sus causas, tratamiento y prevención, puedes manejarlas y reducir su frecuencia. ¡Recuerda! Mantén una buena higiene bucal y hábitos saludables para proteger tu boca y disfrutar de una sonrisa sin dolor, y si necesitas una revisión, ¡contáctanos!